Nuestra alimentación es uno de los asuntos de los que más nos preocupamos.
Siempre buscamos consumir productos frescos, de buena calidad, nutritivos y que tengan un gran sabor; todo esto con la intención de mantener una dieta saludable y balanceada.
Entre los alimentos que siempre deben estar presentes en nuestros menús diarios son las frutas y verduras. Este grupo alimenticio es fundamental para la nutrición; se recomienda que consumamos de tres a cinco porciones por día. Y es que no sólo son nutritivos; su variedad en forma, color y sabor los hacen los favoritos de todos.
Mas no siempre podemos consumirlos, ya sea por cuestiones económicas o de tiempo; en ocasiones nos encontramos con nuestras frutas o verduras favoritas, pero tienen un elevado costo o simplemente no tenemos el tiempo de adquirirlos. Además, con el auge del debate sobre los productos que compramos nos es más difícil decidir.
En primer lugar, el uso de pesticidas es un tema recurrente; estos se usan para proteger a los cultivos de diversos riesgos como plagas, sequías u hongos. Pero la presencia de residuos en estos representa un peligro para la salud de las personas, ya que pueden provocar diversos trastornos y enfermedades como cáncer.
Por otro lado, la comercialización de productos transgénicos genera discusión. Estos alimentos han sido modificados genéticamente para que sean más resistentes, prolonguen su vida y conserven sus nutrientes. Si bien cumplen sus objetivos principales, perjudican los campos de cultivo y al medio ambiente en general.
Entonces, estas problemáticas, aunadas a otras más, entorpecen nuestra elección a la hora de adquirir nuestros alimentos. Afortunadamente, una de las opciones que podemos implementar son los huertos urbanos.
Esta alternativa es sustentable y eficiente pues nos permite cultivar en casa nuestros propios alimentos de consumo, ya sean plantas medicinales, vegetales, frutales u ornamentales. Además, es una elección que beneficiará nuestra salud, ya que ésta nos garantiza una alimentación saludable con productos naturales y libres de químicos nocivos para nuestro bienestar.
Más aún, es amigable con el ambiente pues requiere el reciclaje y reutilización de materiales como PET, aluminio, plástico o vidrio. Representa además un beneficio a nuestra economía debido al bajo costo que requiere su instalación y manutención. Existen diversos tipos; huertos verticales, de regaderas, con riego hidropónico y otros, y cada uno es tan efectivo como el anterior.
También aporta un valor estético y es una actividad que podemos hacer con nuestra pareja o familia. Sólo es cuestión de que decidamos cultivar nuestros propios alimentos, a la par que ayudamos al medio ambiente y nuestra economía.
Preguntas frecuentes de nuestros lectores:
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Last modified: 16 de abril de 2024
