Oriundos de esta isla de Australia, los demonios son marsupiales carroñeros.
El demonio de Tasmania es un marsupial carnívoro, cuya naturaleza bulliciosa por medio de gritos y gruñidos le ha valido tal nombre.
Oriundos de la isla más al sur de Australia, Tasmania; los demonios (nombre científico: sarcophilus harrisii) son animales carroñeros con una cabeza prominente y con una mordida poderosa de hasta 84 kilogramos por centímetro cuadrado con la que puede romper huesos de los cadáveres en descomposición fácilmente.
Inmortalizado en caricaturas, este marsupial juega un papel importante en la cadena alimenticia local.
Con un gran olfato para hallar carroña, los demonios ayudan a su hábitat a descomponer y degradar los nutrientes de nuevo al ecosistema, al comer cualquier animal muerto. Sin embargo pueden cazar presas menores, principalmente pájaros, lagartijas, insectos hasta pequeños wallabies, familia de los canguros.
Normalmente, los demonios comen alrededor del 15% de su peso corporal todos los días, aunque pueden comer hasta el 40% de su peso corporal en treinta minutos si surge la oportunidad, y almacenar la grasa excedente en sus colas.
Estos marsupiales encuentran refugio en troncos, arbustos, madrigueras o cuevas debajo de las rocas, desde donde pueden viajar hasta 16 kilómetros de distancia para encontrar alimento guiados por ese sentido agudo del olfato.
Los demonios de Tasmania no son corredores excepcionalmente rápidos, pero pueden correr un período de tiempo alargado. Además, son excelentes escaladores y nadadores.
La temporada de cría de demonios de Tasmania dura de marzo a mayo. Las madres del demonio de Tasmania tienen un período de gestación de 3 semanas. Como todos los marsupiales, las madres del demonio de Tasmania dan a luz a crías muy pequeñas.
Una vez nacidos, los niños llamados imps se arrastran por el pelaje de la madre y entran en su bolsa, la cual es común entre los marsupiales australianos como el Koala o el Canguro. Puede tener hasta 50 crías a la vez, pero solo un máximo de 4 sobreviven de la bolsa. Los bebés permanecen en su bolsa durante cuatro meses.
Cuando salen de la bolsa, los diablillos a menudo montan en la espalda de sus madres, como los koalas jóvenes, o los possums; o se quedan en el estudio mientras ella caza.
Su población decreciente los pone en peligro
Las amenazas a los demonios de Tasmania incluyen ataques de perros domésticos, perros salvajes como los Dingos australiano y zorros, ser golpeados por vehículos, pérdida de hábitat a causa de la industria maderera y cultivos; así como enfermedades.
En la década de 1990, la población total de demonios de Tasmania se estimó en 130,000 a 150,000. Sin embargo, la población ha estado en continua disminución rápida desde entonces.
Trágicamente, desde mediados de la década de 1990, una enfermedad catastrófica ha matado a decenas de miles de demonios de Tasmania. Llamada enfermedad del tumor facial del diablo, esta condición mortal es un cáncer contagioso raro que causa la formación de bultos alrededor de la boca y la cabeza del animal, lo que dificulta su alimentación.
Esta disminución de su población los ha colocado en la lista de Animales en Peligro de Extinción por parte de la Unión Internacional para la Conservación, la cual los ha incluído en la Lista Roja que pretende crear consciencia para su conservación.
El gobierno del estado de Tasmania ha tomado consciencia de esta situación y ha creado más parques nacionales, así como planes de conservación de las poblaciones de demonios de Tasmania en esta isla australiana.
Si haces senderismo en Australia, es posible que al viajar a Tasmania y hacer senderos como el Overland Track, puedas toparte con alguno de estos ejemplares.
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Last modified: 14 de abril de 2024
