¿Es la hora del almuerzo escenario de una batalla campal para que su hijo logre almorzar?
El niño que hasta hace unos meses se saciaba con un biberón de leche, ha empezado a comer. Primero porque ve que sus padres lo hacen, y el intenta hacerlo en un acto de socialización con su entorno, como también porque sus sentidos están cada día más despiertos, y la fiesta de olores y sabores le hace querer probar de todo un poco.
Claro es que no todo es comida de niño, y hay alimentos cuyos sabores por fuertes o por complejos, como un sushi, no son adecuados para un infante. La adaptación a los sabores de los distintos alimentos es un proceso, y como padres, tenemos un papel que debemos jugar con paciencia e inteligencia.
Que un niño aprenda a comer de todo y con moderación desde pequeño, jugara un papel crucial en la salud de nuestros hijos en el futuro.
Algunas ideas.
· La hora de la comida debe ser la misma.
En la regularidad de las normas, se minimizan las confrontaciones. La hora del almuerzo es la hora del almuerzo. No es la hora de jugar, ni es cuando el infante mejor lo decida. Usted es el padre, tiene el control y debe ejercerlo, y debe ser el mejor ejemplo de ello.
· Las distracciones en la mesa.
No permita televisores cerca de la mesa, no permita juguetes en ella, ni libros ni cualquier elemento que le quite la atención al niño de la comida.
· Seguridad.
Disponga no solo de los utensilios adecuados para sus manos, y un plato que no resbale fácilmente. Si usa utensilios que no son los adecuados y su hijo se lastima o se le dificulta alimentarse, simplemente preferirá volver al biberón, rápido y fácil.
· Presentación.
No llene el plato copiosamente, disponga los alimentos de una forma que el niño vea claramente que es cada cosa, si puede decorar la comida con vegetales u otro topping acorde al plato, acuérdese que su hijo no solo come con el gusto, sino con la vista.
· Preparación.
Si usted esta en la difícil tarea de hacer que su hijo coma ensalada. Le recomendamos que compre un dressing que no tenga sabores muy fuertes, y convídelo a que el mismo mezcle el aderezo. Por ejemplo, una pequeña ensalada Cesar, donde usted puede colocar unas hojas de lechuga, dos tres pedacitos de pan, queso y la salsa, para que el mezcle los elementos y le parezca algo ertido.
· No deje que pique entre comidas.
Si su hijo come de poco en poco, nunca tendrá el apetito suficiente para comer un almuerzo completo, y menos aun cuando usted esta intentando introducir nuevos sabores como los vegetales.
· Armonía.
La hora del almuerzo es una de las horas donde la familia generalmente puede conversar. Su niño pronto será un hombre, y usted puede aprovechar este instante en crear un canal dde comunicación!
Preguntas frecuentes de nuestros lectores:
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Last modified: 2024-11-21T13:30:39+11:00
