Contrariamente a la creencia popular, el maíz es un grano, no un vegetal, y no es apropiado como un elemento básico de la dieta por varias razones.
Tiene muy alto contenido de azúcar y bloquea la absorción de nutrientes en el cuerpo.
Cuando los mayas y los nativos americanos cambiaron sus dietas a una basada en el maíz, las tasas de anemia, artritis, raquitismo, enfermedades infecciosas, y la osteoporosis se dispararon, y el promedio de vida de estos nativos se acortó drásticamente.
El maíz se descompone en azúcar muy rápidamente en el cuerpo, lo que aumenta los niveles de insulina, hace que sientas más hambre y hace que el cuerpo almacene calorías en forma de grasa. No te equivoques – sólo porque el maíz no tiene un sabor dulce, evidentemente, no quiere decir que no está lleno de carbohidratos que se descomponen muy rápidamente en azúcares. Una vez comido, el cuerpo convierte rápidamente maíz y productos derivados de maíz en azúcar. Incluso los almidones de los productos derivados de maíz se descomponen muy rápidamente en el cuerpo, elevan los niveles de azúcar en la sangre y causan antojos de más alimentos a base de carbohidratos.
El maíz contiene altos niveles de fitato, una sustancia química que se une al hierro e inhibe su absorción por el cuerpo. Así que, por lo tanto, una dieta rica en fitato puede hacer que las personas sean más propensas a tener anemia por deficiencia de hierro y en consecuencia a sufrir de fatiga. El fitato también inhibe la absorción de otras vitaminas y minerales, lo que conduce a la propensión a enfermarse, la degeneración física y el envejecimiento.
El maíz es también una fuente baja de minerales importantes, tales como calcio, magnesio y zinc, y vitaminas tales como la niacina (B3).
Tenga en cuenta que incluso los granos como el arroz integral y la avena pueden ocasionar importantes incrementos de azúcar en la sangre en su cuerpo, sobre todo si no eres un deportista muy activo. Y aunque el arroz y la avena tienen menos problemas con la inflamación del sistema digestivo y sus efectos anti-nutrientes que el trigo y el maíz, eso no significa que estos son alimentos son ideales para basar su dieta en exclusividad.
Así mismo, en un esfuerzo para hacer más productivas las cosechas, a la vez que resistentes a herbicidas, varias especies de maíz han sido alteradas gracias a la ingeniería genética. Estos alimentos que han sido manipulados genéticamente han sido constantemente señalados por diversos estudios como los responsables de las incipientes alergias alimentarias en las nuevas generaciones de niños nacidos después de la proliferación de cultivos GMO´s. Es por ello, que la unión europea, ha prohibido estos tipos de granos de maíz para el consumo humano en la región. Aún así, en América Latina, donde los marcos legales y la fragilidad de los sistemas políticos lo permiten; desde harinas y cereales de maíz transgénico son empleados inescrupulosamente por la industria alimenticia.
De hecho, es la industria alimenticia la que por medio de cabildeos en los congresos, ha bloqueado los proyectos de ley para marcar y señalar no sólo el contenido nutricional de los alimentos, sino determinar su origen. En México, la nueva reglamentación de etiquetado es una regla a ciegas que aún no revela la verdad sobre los alimentos que consumes. Y el maíz es el centro de la polémica al igual que el azúcar.
Consejos para cocinar un elote o maíz tierno y delicioso.
Primero aprende a escoger tu mazorca en el supermercado. Para ello toma solo aquellos cuyos granos se vean color crema, y que al presionar los granos con el dedo, se sientan suaves.
Si las hojas están manchadas o decoloridas, y los granos duros; es señal de que los mismos no están en su mejor momento para el consumo.
Para cocinarlos y obtener un maíz dulce y crujiente, puedes hacerlo de varias formas:
- En una olla hirviendo con agua, sal y una cucharada de mantequilla para ese sabor inigualable de un maíz tierno.
- Al vapor, colocando los elotes en una olla de baño de María. Cuece hasta que los granos estén blandos al pincharlos con un tenedor.
- Al microondas, si andas un poco rápido. Sin retirar la hojas, por unos 7 minutos y con una pequeña tacita con agua al lado para que no se deshidraten demasiado y pierdan la textura.
A todos nos encanta el maíz, es parte de la cultura hispano americana, pero una o dos veces a la semana es probablemente es saludable, siempre y cuando verifiques su origen leyendo las etiquetas de los empaques.
Tabla nutricional
Nutriente | Cantidad |
---|---|
Calorías | 86 kcal |
Proteínas | 3.4 g |
Grasas | 1.2 g |
Grasas saturadas | 0.2 g |
Grasas monoinsaturadas | 0.4 g |
Grasas poliinsaturadas | 0.6 g |
Colesterol | 0 mg |
Carbohidratos | 19.7 g |
Fibra dietética | 2 g |
Azúcares | 6.3 g |
Calcio | 2 mg |
Hierro | 0.5 mg |
Magnesio | 37 mg |
Fósforo | 89 mg |
Potasio | 270 mg |
Sodio | 15 mg |
Zinc | 0.5 mg |
Vitamina C | 6.8 mg |
Tiamina (B1) | 0.2 mg |
Riboflavina (B2) | 0.1 mg |
Niacina (B3) | 1.7 mg |
Vitamina B6 | 0.1 mg |
Folato (B9) | 42 µg |
Vitamina E | 0.4 mg |
Vitamina K | 0.3 µg |
Preguntas frecuentes de nuestros lectores:
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Last modified: 2024-10-23T09:30:59+11:00